La 25-hidroxi-vitamina D (vitamina D), participa en la homeostasis del calcio y juega un rol importante en el desarrollo y la preservación del aparato osteomuscular 1 , 2 . Las consecuencias de su déficit se han visto asociadas no solo a trastornos del aparato osteomuscular (debilidad muscular, fracturas, osteoporosis, caídas, etc.) sino también a demencia 3 , enfermedad de Alzheimer 3 , cáncer de próstata 4 , entre otras.
Siendo las fuentes dietéticas de vitamina D muy limitadas, el abastecimiento principal de esta vitamina radica en la síntesis cutánea inducida por la exposición al sol. Este mecanismo está limitado por factores como la latitud, altitud, hora del día, el uso de vestimenta, actividades deportivas al aire libre, color de la piel, edad, uso de bloqueador solar y la profesión que se desempeña 5 . Se ha identificado que las personas que trabajan de noche, profesionales de la salud y quienes trabajan en interiores tienen mayor riesgo de padecer déficit de vitamina D 6 .
Los anestesiólogos desarrollan su actividad al interior de los pabellones quirúrgicos, sin exposición a la luz solar, por lo cual no es raro que se les haya identificado como un grupo de riesgo para déficit de vitamina D 5 . Un artículo reciente de autores nacionales 7 , demostró la existencia de un déficit de vitamina D en anestesiólogos, especialmente en invierno. En base a estos antecedentes se decidió realizar un estudio para explorar los factores determinantes de los niveles de vitamina D en médicos de Clínica Dávila y definir si son los anestesiólogos el único grupo de riesgo en el área de la salud.
Sujetos y Métodos
Se realizó un estudio observacional del tipo corte transversal, para el cual se solicitó la aprobación del Comité Ético-Científico de Clínica Dávila. Se invitó a participar a los médicos de nuestra institución, tanto del servicio de anestesiología (incluyendo a los residentes) como a médicos que desempeñaran su labor fuera del pabellón (internistas, pediatras, neurólogos, intensivistas, urgenciólogos). Se solicitó el consentimiento informado de los participantes y se tomó la muestra de sangre correspondiente. Los resultados fueron notificados a los voluntarios, junto con una orientación acerca de la corrección de las deficiencias cuando correspondiera.
El tamaño muestral fue calculado en base a la revisión sistemática de Sowah 6 , que reportó un 46% de déficit de vitamina D en médicos clínicos y que dicha deficiencia era al menos 20% mayor en quienes trabajaban en pabellón, lo que resultaba en una muestra de 50 anestesiólogos, con un error tipo I de 5% y una potencia de 80%. Por otro lado, para pesquisar una diferencia en los niveles de vitamina D entre anestesiólogos e internistas, usando los datos de Skephedinsdottir 5 , con un punto de diferencia sobre una media de 28,2 ng/ml, (reportado en anestesiólogos), se requerían 23 voluntarios por grupo (con error tipo I de 5% y potencia de 90%).
Se aplicó además una encuesta a cada participante, que incluía preguntas referidas a características demográficas, dietéticas, exposición al sol y la clasificación del color de la piel de acuerdo al foto-tipo de Fitzpatrick 8 . La recolección de las muestras de sangre se realizó antes de las 16:00 hrs, entre septiembre y diciembre del año 2018 principalmente.
Se midieron niveles de vitamina D y parathormona (PTH) en sangre. Se extrajeron 6 cc de sangre a los voluntarios, e inmediatamente las muestras fueron protegidas de la luz y conservadas en frío hasta ser analizadas. La determinación de la vitamina D se realizó en suero con ensayo de electro quimioluminiscencia y la de PTH en muestra de plasma con ácido etiléndiaminotetracético (EDTA) y con electro quimioluminiscencia. Los valores de laboratorio 9 utilizados para clasificar a los participantes fueron: niveles suficientes de vitamina D ≥ 30, insuficientes < 30 y ≥ 20 y deficientes < 20. Se consideraron valores normales de PTH 10 los comprendidos entre 10 y 65 pg/ml.
Las variables cuantitativas fueron resumidas con promedio ± desviación estándar (DS) o mediana [rango intercuartílico] y las variables categóricas con proporciones. Se consideraron significativos los valores p menores a 5%, con intervalos de confianza de 95%. El análisis estadístico se realizó con regresión lineal.
Las variables que demostraron un valor p significativo en el análisis univariado fueron consideradas para un modelo multivariado. Los resultados fueron reportados según lo recomendado en el texto de Morgan 11 et al. El programa estadístico utilizado fue STATA R 13.
Resultados
Se obtuvieron muestras de 85 médicos y resultados efectivos en 81 de ellos, de los cuales 59 eran anestesiólogos.
En la Tabla 1 se aprecia que la muestra estudiada estaba compuesta principalmente por adultos jóvenes, con una proporción equilibrada según género, eutróficos y en su mayoría anestesiólogos. La coloración de la piel era predominantemente clara y blanca-oliva, (Fitzpatrick II y III) 8 , la cuarta parte de ellos utilizaba un suplemento de vitamina D, casi la mitad se exponía al sol y la gran mayoría ingería pescado al menos una vez por semana.
Tabla 1 Demografía y características de los sujetos de estudio
Variable | Resultado |
---|---|
Tamaño muestral (n) | 85 |
Edad* (años) | 36 (25-83) |
Mujeres (%) | 51 |
Índice de masa corporal** (kg/m 2 ) | 24,6 ± 3,1 |
Anestesiólogos (%) | |
Sí | 73 |
No | 27 |
Horas semanales de trabajo* | 45 (28-84) |
Color de la piel según Escala de Fitzpatrick (%) | |
1 | 18 |
2 | 32 |
3 | 41 |
4 | 9 |
Actividades al aire libre (%) | 42 |
Uso de bloqueador solar (%) | 65 |
Uso de suplemento vitamina D (%) | 25 |
Ingesta de alimentos ricos en vitamina D (%) | 70,6 |
*Mediana (Mín.- Máx.). **Promedio ± desviación estándar.
Los niveles de vitamina D en los médicos estuvieron bajo lo normal (25,3 [± 12,4] ng ∙ ml - 1 ), 65% de la muestra estaba bajo la suficiencia y 27% se ubicaba dentro de la categoría de deficiencia ( Figura 1 ).
Pese a que los valores de vitamina D fueron más altos en anestesiólogos (25,3 [± 11,4] ng ∙ ml - 1 ) que en no anestesiólogos (23,2 [± 14,7] ng ∙ ml - 1 ) no hubo diferencia significativa entre ellos.
La mayoría de los anestesiólogos se ubicaban en el rango de la insuficiencia y de lo normal. Los participantes no anestesiólogos se distribuían principalmente entre la deficiencia y la insuficiencia, pero esto, nuevamente, no constituyó diferencia significativa entre los 2 grupos ( Figura 2 ).
Se recurrió a una transformación logarítmica de los niveles de vitamina D para ajustarlos a una distribución normal y así realizar un análisis con regresión lineal.
El resultado del análisis univariado se observa en la Tabla 2 . Para facilitar la interpretación se presentan los antilogaritmos de los coeficientes de regresión: ( β ): e β . Se constató en forma estadísticamente significativa que los niveles de vitamina D eran 25% más bajos en hombres que en las mujeres, que por cada unidad de aumento del índice de Masa Corporal (IMC), estos disminuían en 4% ( Figura 3 ), y que el consumo de un suplemento de dicha vitamina los incrementaba en 56%, en relación a los que no lo tomaban ( Figura 4 ).
Tabla 2 Análisis univariado
Coeficiente () | t | I. Confianza 95% | p-valor | |
---|---|---|---|---|
Edad | 0,99 | -0,90 | 0,98 1,01 | 0,373 |
Género masculino | 0,75 | -3,02 | 0,62 0,91 | 0,003 |
IMC | 0,96 | -2,69 | 0,93 0,99 | 0,009 |
Fitzpatrick 1 2 3 4 | Referencia 0,97 1,07 1,23 | Referencia -0,23 0,50 1,05 | Referencia 0,71 1,31 0,81 1,43 0,83 1,84 | Referencia 0,821 0,622 0,297 |
Anestesiólogos | 1,13 | 1,08 | 0,90 1,41 | 0,286 |
Horas semanales trabajo | 0,99 | -1,69 | 0,98 1,01 | 0,094 |
Actividad aire libre | 1,10 | 0,91 | 0,89 1,34 | 0,367 |
Uso de bloqueador solar | 1,20 | 1,75 | 0,96 1,48 | 0,083 |
Suplemento vitamina D | 1,56 | 4,32 | 1,27 1,92 | 0,000 |
Dieta rica en vitamina D | 0,84 | -1,53 | 0,68 1,05 | 0,130 |
Se construyó un modelo multivariado con las variables que cruzaron el umbral de la significancia requerida. El modelo resultante ( Tabla 3 ), era significativo F (5,73) = 6,82; p = 0,000; R 2 = 0,32. Tanto el IMC como el uso de un suplemento mantenían los efectos descritos en el análisis univariado. El género en este nivel de análisis no presentaba influencia significativa.
Tabla 3 Análisis multivariado
Coeficiente () | T | I. Confianza 95% | p-valor | |
---|---|---|---|---|
Género masculino | 0,89 | -1,12 | 0,73 1,09 | 0,267 |
IMC | 0,96 | -2,28 | 0,93 0,99 | 0,025 |
Suplemento vitamina D | 1,56 | 4,47 | 1,28 1,90 | 0,000 |
IMC*Suplemento * | 0,97 | -1,20 | 0,91 1,03 | 0,260 |
*Interacción entre IMC y suplemento.
El uso de un suplemento de vitamina D producía una modificación del efecto del IMC ( Figura 5 ), por lo que se sospechó la existencia de una interacción 12 entre estas variables, pero esto se descartó con prueba de razón de verosimilitudes 13 ( Likelihood Ratio χ 2 (1) = 1,56; p = 0,212).
Los niveles de PTH de la muestra estuvieron dentro del rango normal (49,9 ± 17,2 pg ∙ ml - 1 ).Tampoco hubo diferencia significativa entre anestesiólogos (49,6 ± 18,2 pg ∙ ml - 1 ) y no anestesiólogos (50,8 ± 14,3 pg ∙ ml - 1 ).
Pese a existir una correlación inversamente proporcional significativa entre vitamina D y PTH ( Figura 6 ), lo cual era esperable 9 , dicha asociación no se evidenció al analizar los niveles de PTH a través de las 3 categorías de vitamina D ( Figura 7 ).
Discusión
Los resultados demostraron que en los médicos participantes de este estudio existía un déficit de vitamina D independientemente de la especialidad en que se desempeñaban. La proporción afectada en esta muestra fue incluso significativamente más alta que lo descrito en una reciente revisión sistemática 6 .
Fue destacable que esta deficiencia no estaba relacionada con aquellas variables que implicaran exposición al sol, incluida la coloración de la piel, horas de trabajo, deporte al aire libre y uso de bloqueador solar. Por otro lado, si se demostró una asociación inversa entre niveles de vitamina D e IMC. Esta relación ha sido previamente descrita 14 pero el mecanismo causal no ha sido plenamente descubierto 14 , se ha planteado la posibilidad de que exista secuestro de la vitamina en el tejido adiposo 15 o bien un déficit asociado de la enzima 25-hidroxilasa 16 . La única manera de soslayar esta deficiencia fue tomando un suplemento de vitamina D. Hubo indicios de una interacción entre índice de masa corporal y suplemento que no pudo ser demostrada en esta muestra pero que sería importante continuar investigando.
No se observó variación estacional de los niveles de vitamina D, lo cual no tiene clara explicación y contradice los hallazgos de otro estudio chileno 17 cuya unidad de análisis también fueron anestesiólogos. Los resultados de esta investigación se suman a la evidencia proporcionada por otras investigaciones de la literatura médica nacional 18 , 19 que reportan una alta prevalencia de hipovitaminosis D en distintos grupos de la población chilena.
Pese a la existencia de una correlación inversamente proporcional entre niveles de vitamina D y PTH, hubo 2 participantes pertenecientes a la categoría “suficiente” de vitamina D que exhibieron niveles elevados de PTH, en los cuales se sospechó un hiperparatiroidismo primario, de lo que fueron alertados.
Se podría haber mejorado la calidad de este estudio realizando las mediciones a fines del invierno o al menos en una misma estación del año. Puede ser discutible la inclusión de sujetos que estuvieran usando un suplemento de vitamina D pero uno de los fines de este estudio era exponer la realidad del problema en nuestra institución y por otro lado la ingesta de suplemento se incorporó como variable en el modelo de regresión multivariado lo que implica que se establecieron comparaciones entre sujetos equivalentes. Además, se podría haber optimizado la minuciosidad, tanto de la encuesta alimentaria como del registro del número de horas de exposición al sol y dosis del suplemento utilizado.
En conclusión, se demostró que la hipovitaminosis D afectaba por igual a los anestesiólogos y a los médicos que ejercían otras especialidades y la obesidad agravaba estos índices. El uso de un suplemento de vitamina D fue el único factor protector observado.